El PP de Sevilla trata a los trabajadores como “delincuentes”

Ignacio Flores, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Sevilla, no debe dormir tranquilo tras despedir a trabajadores de la grúa municipal. No lo decimos nosotros, lo decía él mismo en un Pleno del 2005, cuando criticaba al gobierno de PSOE e Izquierda Unida por los injustos despidos de cuatro trabajadores de la empresa concesionaria. “Anda que esta noche dormiréis muy tranquilos”, “estáis tratando a los trabajadores como delincuentes”, clamaba entonces a los que estaban en el poder. 20 años después es él el brazo ejecutor y quien autoriza no cuatro, sino seis despidos improcedentes, empeorando el servicio prestado a todos los sevillanos y justificando el chollo para la empresa concesionaria.

Quién te ha visto y quién te ve, Flores. 20 años dan para mucho en la carrera de todo un profesional de la política, capaz de cambiar su discurso según le convenga. “Esto es una vergüenza”, decía entonces, cuando se lamentaba de cómo los despidos afectarían a las “cuatro familias” de los despedidos. Hoy parecen darle exactamente igual.

Entonces no dudó en llevar un punto al Pleno del Ayuntamiento de Sevilla y defender a los trabajadores con ahínco. Desde entonces ha llovido mucho, hemos vivido una crisis económica, una pandemia, una reforma laboral, miles de despidos en el país… pero él sigue en el sillón, cambiando su discurso con el único objetivo de llegar al poder.

Al igual que ahora, en 2005 la CNT se ponía al frente de las manifestaciones para clamar contra despidos injustos. Fue la huelga más larga de la historia de Sevilla hasta ese momento. Hoy, dos décadas después, el cuento se repite con otra empresa que intenta hacer negocio con los servicios públicos. De nuevo, nos enfrentamos a despidos arbitrarios y una concesionaria que se ríe del pliego de condiciones.

Ahora no es PSOE e IU, es el turno del PP de Flores. Gracias a su firma como concejal, el Ayuntamiento aceptó una oferta temeraria de la empresa Setex Aparki, con una bajada del 25%. Desde CNT lo advertimos y así ocurrió: el primer día se confirmaba el despido de seis compañeros, lo que unido a la falta de materiales está provocando una ralentización de servicios en la ciudad. Él no ha hecho nada para evitarlo, mientras la empresa goza de un contrato de 7,5 millones de euros para que sus dueños hagan negocio a costa de los sevillanos.

Flores hará como que se le ha olvidado, pero la CNT sigue hoy en el mismo sitio, pidiendo justicia, ahora con otro color político al frente del Ayuntamiento. Exigimos la readmisión de los despedidos, cumplimiento del contrato, revocación de la concesión a Setex y una nueva licitación con garantías reales. Queremos un servicio de grúa digno, público, eficaz y justo. Y mientras tanto, seguiremos en la calle.